5 cosas que he aprendido liderando equipos

Uno de mis principales desafíos laborales que asumí desde que volví de mi licencia de maternidad fue tomar el liderazgo de equipos en Globant. Ciertamente yo ya venía desde hace mucho más tiempo mentoreando o acompañando en sus primeros pasos a personas que ingresaban a nuestra práctica de Marketing Cloud en el Studio de Salesforce. Sin embargo, fue a partir del año pasado que formalmente me asignaron el rol y la responsabilidad de estar liderando equipos.

Y vaya desafío que he tenido 😂 porque a la par estaba liderando una casa con un ¡nuevo integrante! Ha sido lindo, aunque al inicio estaba llena de muchísimas dudas y auto-cuestionamiento, ¿sabes? ese síndrome del impostor que no se calla cada que intentamos comenzar algo diferente o nuevo.

He tenido que aprender sobre muchos procesos y lineamientos, pero creo que lo más difícil ha sido descubrir como conectar con cada persona. ¡Wow! que arte milenaria implica tratar de entender al otro, tratar de ponerte en sus zapatos e incluso intentar darle algún consejo sobre alguna situación en la que quizás no has estado antes. Y de aquí destaco que hay tres cosas que yo empece a practicar conscientemente:

• Escuchar activamente.
• Entender que cada persona aprende y siente diferente, y es necesario abordar a cada una a su manera.
• Usar tu experiencia como ejemplo, pero no como la regla. Cada quien deben escoger lo que más le funciona.

A pesar de lo complejo que suena, siendo honesta, pienso que no he estado tan mal. Y aunque sé que aún hay oportunidad para mejorar, me siento bastante satisfecha con los resultados hasta ahora😍.

Y como todo desafío o nueva experiencia trae consigo un aprendizaje, hoy quiero contar lo que he aprendido liderando equipos. Podría hacer una lista interminable pero aquí va mi Top 5:

Ser el líder que me gustaría tener

He tenido líderes de todo tipo durante mi vida laboral. Algunos me han dejado muy claro la clase de líder que NO quiero ser, pero otros claramente han tenido un impacto positivo y son esos los que me inspiran. Algo que he visto que tienen en común y que he replicado es que son auténticos, transparentes y lo más empáticos posible. Esto me ha ayudado a construir relaciones basadas en la confianza y la comunicación abierta.

Dedicar tiempo a enseñar

Compartir mi conocimiento y experiencia ha sido clave para potenciar el crecimiento de mi equipo. Dedicar un espacio de tiempo para ayudarles a resolver problemas en los que están estancados y además explicarles las razones para escoger un camino u otro en esas decisiones ha funcionando para fomentar su desarrollo e incentivarlos a aprender nuevas cosas.

Hace poco leí algo (no recuerdo la fuente) que mencionaba que invertir en el crecimiento de nuestro equipo nos lleva a cosechar resultados sobresalientes y no puedo estar más de acuerdo✨.

Confiar en el equipo

Y esto va muy ligado también a aprender a delegar. Este punto sigue siendo un work in progress para mi, pero este año me ha ido bien con la tarea. ¿Cómo lo sé? porque este año por primera vez, en mucho tiempo, me tomé unas vacaciones largas con la plena seguridad de que todo estaría bien, ¡y así fue! No voy a negar que tuvieron sus incidentes jajajaja pero yo no hice falta para resolverlos🙌🏼.

Y es que delegar no solo alivia la carga que tenemos liderando equipos, sino que también empodera a todos sus integrantes. Confíar en sus habilidades y capacidades nos ayuda a crear un entorno de autonomía y a liberar todo el potencial para alcanzar niveles más altos de éxito.

Reconocer el esfuerzo

Reconocer al otro es clave para motivar y fortalecer el compromiso. Celebra los logros individuales y colectivos, por pequeños que parezcan. Destacar el esfuerzo y la dedicación es super importante para mantener al equipo con un espiritu alegre y con ganas de alcanzar metas más ambiciosas.

Dar feedback oportuno

Quizás esto sea lo más incomodo que me ha tocado aprender liderando equipos, y es que es muy facil dar feedback y celebrar cuando todo sale bien, pero que dificil es cuando es lo contrario. Sin embargo resulta vital brindar orientación oportuna para promover un ambiente de aprendizaje y mejora continua.

En uno de los cursos de liderazgo que hice el año pasado, escuché una frase que decía «The feedback is a gift». Esa frase me pareció de lo más poderosa, me la quedé guardada para usarla de ejemplo cada que puedo. Y es que sí, el feedback es un regalo porque una vez que lo recibes tu decides que hacer con él, pero quien lo entrega también decide que tanto prepara o que tan detallista es con eso que va a dar.

Piensalo un poco, ¿qué hacen cuando van a regalarle algo a alguien que aprecian mucho? Al menos yo me preocupo porque sea algo que le va a agradar, que le agregue valor en su vida diaria o que cuando lo vea sienta que es de los regalos más bonitos que ha recibido. Lo mismo deberíamos hacer al momento de dar feedback, pensar si al otro le será util y que le permita construir o usarlo a futuro.

Conclusiones

Liderar equipos ha sido un desafío emocionante y enriquecedor para mí, es un proceso de constante evolución, y que hasta ahora los resultados han sido gratificantes.

Liderando equipos he aprendido que es algo que va más allá de una posición de poder y que se trata de como impactamos vidas. Donde se hace necesario escuchar y conectar con cada uno a su manera para que juntos podamos crecer tanto en lo profesional como en lo personal.

Y tú ¿estás lideando equipo?, ¿qué has aprendido? Me encantaria leerlo en los comentarios🤩

¡Gracias por leer mi post!  y nos vemos en la siguiente entrega de lo que he aprendido💜.